Netflix y Warner: La compra desata debate en industria y gobierno

La compra de Warner por parte de Netflix provocó críticas del gobierno, productores y cadenas de cine, quienes advierten el peligro.

En esta nota: 

  • Netflix compra Warner Bros por 82,700 millones de dólares, una operación histórica que podría transformar por completo el modelo cinematográfico y la distribución en salas.
  • Salas de cine, productores y senadores estadounidenses se oponen, argumentando riesgos antimonopolio, menor competencia y un posible impacto negativo en la exhibición tradicional.
  • Netflix promete mantener estrenos en cines, pero no descarta cambios en las ventanas de exhibición, lo que ha generado mayor incertidumbre en la industria.

Tras un año excepcional para Warner Bros, que se posicionó como el estudio más taquillero del 2025, la compañía decidió venderse a Netflix por 82,700 millones de dólares, una histórica compra que ha generado un intenso debate dentro de la industria.

Aunque se ha insistido en que las películas de Warner continuarían estrenándose en salas de cine, el CEO de Netflix, Ted Sarandos, afirmó que no lo garantizan por completo, lo que sugiere un cambio drástico en el modelo cinematográfico tal como lo conocemos.

De momento, Cinema United, varios productores de Hollywood y distintos senadores del gobierno ya manifestaron su rechazo, argumentando que la adquisición podría violar leyes antimonopolio y poner en riesgo la competencia.

Pero ¿por qué se oponen? ¿Qué está ocurriendo realmente en la industria? A continuación, te explicamos todos los detalles.

Warner Bros
Imagen: Mario Tama | Getty Images

Netflix y Warner Bros. Discovery cambiarán la industria 

Netflix y Warner Bros. Discovery anunciaron que firmaron un acuerdo definitivo mediante el cual la plataforma de streaming adquirirá el legendario estudio, incluyendo sus divisiones de cine y televisión, HBO Max y HBO.

Netflix señaló en un comunicado que espera mantener las operaciones actuales de Warner Bros. en el corto plazo. Además, confirmó que HBO Max continuará como un servicio independiente, al mismo tiempo que incorporará parte del contenido de HBO y HBO Max a su catálogo global.

Al añadir las extensas bibliotecas de cine y televisión, junto con la programación de HBO y HBO Max, los miembros de Netflix tendrán aún más títulos de alta calidad para elegir. Esto también nos permite optimizar nuestros planes, mejorar la experiencia del consumidor y ampliar el acceso al contenido”.

En cuanto a los estrenos en salas de cine, Netflix aseguró que buscará consolidar las fortalezas del modelo actual. Por ahora, Warner Bros mantiene acuerdos de exhibición en cines hasta 2029; sin embargo, la empresa no considera necesario que las películas permanezcan tantas semanas en cartelera. “Mi oposición ha sido principalmente hacia las largas ventanas de exclusividad, que no creemos que sean realmente amigables para el consumidor”, señalaron.

Este año, Ted Sarandos ya había adelantado que el comportamiento del público está cambiando y que los cineastas deben adaptarse a ello, por lo que no todas las películas debían verse en una sala de cine. “La gente creció pensando: ‘Quiero hacer películas en una pantalla gigante, que desconocidos las vean, que estén meses en cartelera y que la sala esté llena’. Es un concepto obsoleto”.

Netflix
Imagen: Jill Connelly | Bloomberg

Salas de cine y gobierno se opone a la compra 

Tras el anuncio de la compra, Cinema United, la asociación de exhibidores que representa a las salas de cine en Estados Unidos, declaró su firme oposición a la adquisición, argumentando que representa una amenaza directa para la exhibición tradicional.

“El impacto negativo de esta adquisición afectará a los cines, desde los circuitos más grandes hasta las salas independientes de una sola pantalla en pequeñas localidades de Estados Unidos y de todo el mundo”.

Cinema United señaló que el modelo de negocio de Netflix no respalda la exhibición en salas, sino que históricamente la ha disminuido. Por ello, pidió a los reguladores analizar la operación “con detenimiento” para evaluar el impacto que podría tener en los consumidores, en la exhibición cinematográfica y en toda la industria del entretenimiento.

Por otro lado, la senadora Elizabeth Warren calificó el acuerdo como “una pesadilla antimonopolio”, ya que formaría un gigante mediático con control sobre casi la mitad del mercado del streaming. Según la legisladora, esto podría derivar en precios más altos, menos opciones y un ecosistema donde los usuarios “tendrían menos control sobre qué y cómo ver”.

Warren insistió además en que el Departamento de Justicia debe aplicar las leyes antimonopolio “de forma justa y transparente”, sin permitir que la revisión del acuerdo se convierta en espacio para “tráfico de influencias o sobornos”.

Otros analistas de la industria también expresaron su preocupación, como Jason Kilar, exdirector ejecutivo de Hulu, quien afirmó que vender WBD a Netflix es un peligro. “Se necesita un número suficiente de empresas fuertes y dinámicas que compitan entre sí para producir y distribuir películas, series y eventos en vivo”.

No obstante, ejecutivos de Netflix aseguran que la compañía aún representa menos del 10% de la audiencia televisiva total en sus mercados lo cual, según ellos, demuestra que todavía hay amplio margen de crecimiento y no un dominio anticompetitivo, por lo que no deberían impedirle la compra.

Netflix
Imagen: Dania Maxwell | Los Angeles Times