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El Niño y la Garza: ¡Desciframos su significado!

Te contamos aquí el mensaje detrás de El Niño y la Garza y por qué podría ser una de las historias más complejas de Hayao Miyazaki.
El Niño y la Garza: ¡Desciframos su significado!
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En este artículo:

Analizamos a detalle el mensaje detrás de El Niño y la Garza para hablar sobre por qué es incorrecto decir que es simplemente una película “semi-autobiográfica” de Hayao Miyazaki.

Studio Ghibli, a través de innumerables historias, ha explorado la relación entre hijos, padres y cómo la infancia puede ser tan dura como la adultez, y cómo los/as niños/as pueden ser tan valientes y entender conceptos difíciles e intensos como cualquier persona que ya alcanzó la madurez.

En Mi Vecino Totoro, dos niñas que deben lidiar con su madre en el hospital se adentran a un mundo mágico para descubrir que hay luz en todo momento de oscuridad. En El Viaje de Chihiro, la heroína debe aprender a separarse de sus padres para encontrar su identidad e independencia. Y En Kiki’s Delivery Service, una brujita aprende cómo ser de utilidad en un mundo que puede ser frustrante y desolador. 

Pero realmente nunca había explorado la temática sobre crecer y superar adversidades como en El Niño y la Garza. Una película que, aunque ha habido mucha anticipación por “ser la película más autobiográfica de Hayao Miyazaki”, en realidad brilla por la majestuosidad con la que habla sobre cómo no somos el centro del universo y lo mejor que podemos hacer es dejar ir, dejar fluir.

El Niño y la Garza
Imagen: Cine Canibal

El Niño y la Garza: ¿Una historia “autobiográfica” más de Hayao Miyazaki?

Durante la premiere de El Niño y la Garza en México, Emilio Treviño, actor que presta su voz para dar vida a Mahito, el protagonista de esta nueva historia, dijo que “esta era una película que no se ve con los ojos, se siente. Y luego se ve más veces, porque seguramente conforme pase el tiempo y conforme más vivamos, le encontraremos más sentido” y es muy cierto.

Con una secuencia inicial demoledora sobre el embate de la guerra en Japón, Mahito ve cómo su madre muere en un incendio provocado por bombardeos. Para los/as fans de Hayao Miyazaki, esta es una de las muchas referencias que tendrá la película tanto a su vida como a su trabajo, pero eso es una simplificación y hasta una idea redundante que nos impide entender mejor el mensaje de la película.

Hayao Miyazaki ha permeado su arte con su vida y sus experiencias de vida a lo largo de toda su filmografía. Sus primeros recuerdos fueron las consecuencias de la guerra en Japón, y películas como Porco Rosso y El Viento se Levanta ya habían explorado sus opiniones y vivencias, así como su obsesión con los aviones, desde antes que El Niño y la Garza.

Pero El Niño y la Garza nos presenta a un protagonista enojado y resentido. Contrario a otros héroes y heroínas de Studio Ghibli, Mahito resiente a su padre por haber reconstruido su vida con otra mujer. Resiente la guerra que le quitó su infancia. Resiente que su mundo está cambiando y no le gusta cómo está quedando.

Está tan enojado que, cuando una aterradora Garza parlante (Interpretada por Poncho Herrera en español) le dice que lo puede conducir a un lugar en donde podría rescatar a su madre, él sabe perfectamente que es una mentira y aunque está dispuesto a pelear a muerte con el ave, también está dispuesto a entrar a ese mundo y ver qué le ofrece.

Y contrario a otros mundos mágicos que nos ha pintado Miyazaki, El Niño y la Garza nos presenta un multiverso donde versiones de los seres queridos de Mahito están ahí. Donde periquitos comen carne humana, pero aún así son seres histéricos que defecan dónde sea. Y que además son terribles amenazas para las almas que quieren nacer.

Los mundos de El Niño y la Garza son inhóspitos y raros. Mahito, aunque encuentra momentos de diversión y entendimiento, tiene que luchar mucho y cuidarse demasiado. La Garza, por supuesto, mintió sobre su madre, pero a cambio le dio una lección especial a este héroe: que él no es el centro del universo.

El Niño y la Garza
Imagen: Cine Canibal

El Niño y la Garza: ¿Cuál es su significado?

Mahito conoce a una versión alterna de su madre que le ayuda a surcar el estremecedor mundo en donde está. Ella no es precisamente su madre, pero sin duda hay una conexión especial. En realidad, a quien debe salvar es a su tía/la nueva esposa de su padre. Pero no de una maldición, ni de una amenaza, sino de los mismos prejuicios que Mahito tiene sobre ella.

El Niño y la Garza está inspirado en el libro “How do you live?” una historia sobre un chico que, después de la muerte de su padre, trata de encontrar significado en el mundo gracias a las enseñanzas que le dejó su tío a través de cartas. Y una de sus frases más devastadoras también nos ayudan a entender mejor la nueva historia de Miyazaki:

“Cuando somos infantes, nuestro yo se vuelve parte central de nuestro pensamiento. Como cuando se creía que la Tierra era el centro del universo […]

Conforme crecemos, aprendemos a entender a la gente y las cosas desde una perspectiva más amplia: esto incluye lugares y sentimientos […] Pero aún entre adultos, la tendencia humana de pensar y formar juicios está muy enraizada en que el centro son ellos/as mismos/as.

Liberarse de de esta forma tan egocéntrica de ver la vida es poco común […] La mayoría de la gente que se resbala en esta forma egocéntrica de pensar, es incapaz de entender los hechos de la materia, y terminan viendo sólo lo que les conviene en sus circunstancias”.

How Do you Live, Genzaburo

Esta frase puede encapsular bien el viaje de Mahito en El Niño y la Garza. Él tiene la opción de dominar el nuevo mundo y convertirse en su rey, o aceptar la vida que le ofrece su padre, aunque defectuosa y dolorosa, pero más real, libre de espejos de humo, de engaños, de mentiras. A través de esta dicotomía, aprende que, para de verdad ser libre y vivir plenamente, tiene que aceptar que el universo y sus secretos no giran alrededor de él ni de sus deseos.

Al final, Mahito toma la decisión de regresar a su casa, donde le espera una vida mundana. Pero ha cambiado: ya no quiere juzgar a sus padres, o su vida, ya no quiere cambiar la realidad. Él ha conocido la inmensidad del universo y lo diferente que es, ahora sabe que hay luz y oscuridad en toda situación. Ahora sabe que, para conocer y entender de verdad el universo alrededor nuestro, primero hay que aceptar y fluir con las cosas que se nos presentan en el día a día, aunque sean dolorosas, raras e incómodas.

El Niño y la Garza es una conmovedora historia sobre dejar ir, sobre el desapego, sobre aceptar, evolucionar y adaptarse. No es un cuento de hadas, no hay respuestas fáciles, no es una historia que nos haga sentir mejor ni que nos entregue moralejas y mensajes sencillos.

El Niño y la Garza es el tipo de película que esconde verdades sobre la condición humana que, como dijo Emilio Treviño y como suele pasar en la vida real, se tienen que sentir y experimentar de manera caótica e inesperada, así como Mahito lo hizo. Para después, poco a poco, descifrar su significado.

El Niño y la Garza
Imagen: Cine Canibal
Poster El Niño y la Garza
El Niño y la Garza
Género(s)

Acción, Aventura, Drama

Director(es)

Hayao Miyazaki

Reparto

Emilio Treviño, Poncho Herrera, Elizabeth Infante

Disponible en

Cine

Crítica | El Niño y la Garza

El Niño y la Garza es la historia más retadora y ambigua que nos ha ofrecido Hayao Miyazaki, pero también la más conmovedora.

¡Está Genial!

4.0
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