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The Walking Dead 9×04: “The Obliged”

Un capítulo flojo en varias partes que deja una incógnita sobre el futuro del protagonista.
The Walking Dead 9×04: “The Obliged”
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¿Será éste el fin de Rick?

 

The Walking Dead ha venido superando obstáculos de críticas en su Temporada 9. No ha sido fácil, porque ya muchos -me incluyo- habíamos abandonado la serie tras fracasar tanto.

El camino de esa recuperación, desgraciadamente, se empañará con la que parece ser una crónica de una muerte anunciada… Y de Rick, ni más ni menos. No es que no se supiera, la misma AMC se ha encargado de promocionar la “salida” de este personaje; el problema es el cómo.

Según lo que vimos en el episodio 4, titulado “The Obliged”, la muerte del querido y odiado protagonista es inminente. O no, puede que simplemente estén jugando a otro “momento Glenn en el basurero”. O sea: un poco de todo y de nada.

Michonne y Negan

Para comenzar con este review, arrancaré con la parte más floja de todas. Desafortunadamente, el episodio no estuvo tan bien construido como los anteriores y los llamados a la acción fueron forzados a más no poder.

A Michonne la vemos en un loop donde estudia leyes ¿? de día, cuida a Judith y de noche mata walkers. No es mala rutina, pero sólo con repetir la secuencia una vez ya se siente de más. A pesar de que trata de darse un “propósito” a esos hechos, se evidencia nuevamente una pobre escritura del guión.

Cuando a la experta de la espada la llaman porque Negan está en huelga de hambre, ella va directo a la celda. Ahí, le concede unos enormes 20 minutos para que platiquen. ¿Por qué acceder tan rápido a lo que pide el terrible villano? ¿Por qué siquiera dirigirle la palabra? Es cierto que ha pasado tiempo y ella cree en la doctrina Grimes, pero éste es de esos momentos introducidos a la fuerza que ya nos habíamos acostumbrado a no verlos más.

Toda la conversación, en la que se salvan algunas partes, desemboca en una resolución simplista y un poco ridícula. Negan logra meterse en la mente de Michonne haciéndole ver que “son iguales” y que necesitan de la muerte; de ahí lo de matar walkers.

Adiós Anne

Brevemente en el episodio, y para hacer un respiro a la trama principal, nos transportan al Basurero con Anne y Gabriel. En primera instancia, Anne le quiere hacer lo mismo que intentó con Negan: sacrificarlo y esperar a que sea comido por un walker. Todavía no capto bien por qué de esa manera, pero en fin… Quizás el objetivo sea dar más drama.

Al final, Anne se arrepiente cuando el Padre Gabriel se echa la culpa a sí mismo por el hecho y le dice que la perdona. Luego, ésta lo duerme con un químico.

Al despertar, él encuentra una carta en su sotana, donde ella le deja dicho que se fue sola a buscar un lugar mejor. Este nuevo romance tendrá que esperar un poco más.

Problemas en el campamento

Eugene, cuyo uso de palabras rebuscadas todavía está intacto, llega a la conclusión de que el puente que tanto costó construir no resistirá. “El esfuerzo valió la pena”, le dice Rick, pero desafortunadamente no es suficiente.

Por otro lado, los Saviors pudieron deducir que la gente de Oceanside es quien los estaba cazando. Llegan al campamento armados en busca de venganza, pero son detenidos por Carol, quien nuevamente hace su movimiento bad-ass para resolver el asunto.

A pesar de ello, esto genera un intercambio de balas que nos conduce a la parte medular del argumento… Pero antes, hay que decir que Maggie y Jesus tuvieron nuevamente una pequeña discusión por dos temas: uno, el hecho de que Jesus sabe que el viaje de ella a Alexandria es para matar a Negan y dos, que siguen llegando cartas de Georgie, quien la quiere reclutar.

“Dame tu mano, hermano”

Si algo hemos dicho que ha mejorado mucho The Walking Dead en esta temporada son los diálogos. Acá nuevamente lo dejan claro.

Rick es advertido de que Maggie se dirige con prisa hacia Alexandria, pero antes es “auxiliado” por Daryl, quien le ofrece llevarlo en moto. El viaje será interrumpido cuando Daryl no va hacia la dirección correcta, por lo que Rick le pide que se detenga.

Rápidamente se dan de puñetazos y caen en un muy extraño -y conveniente para el guión- agujero profundo a un lado de la pista.

Ahí paran la pelea para ver cómo salir, por lo que se toman el tiempo para limar algunas asperezas. Siempre he creído que estos dos tienen mucho para dar. Daryl es más que una voz ronca y Rick es más que su voz de mando. Creo que, aunque ésta no fue una conversación tan extensa, sí transmitió un entendimiento necesario entre ambos: dar y ceder, como todo en la vida.

La plática, a la que todavía le faltó más sustento, tuvo que cortarse por la presencia de los walkers que van cayendo al agujero y que representan peligro para los dos. Rick logra salir primero al sujetarse de una raíz y, estando arriba, extiende su mano a Daryl, a quien se refiere como hermano.

¿El adiós de Rick?

Tras salir de ese peligro, se ven rodeados de hordas de muertos vivientes. Rick agarra un caballo, que había salido corriendo del campamento y que JUSTAMENTE se había detenido ahí (jaja, ¡estos guionistas!), para tratar de guiar a los walkers fuera del puente.

Daryl le reclama que deje eso, que al final es sólo un puente, pero Rick le pone un valor emocional tan grande que se rehúsa a abandonar ese proyecto. El de la ballesta se va en su moto para distraerlos por otro lado, mientras Rick intenta ingeniárselas para salir de ese momento tenso, como tantas veces lo ha hecho.

Rick llega eventualmente a una encrucijada, en donde el caballo se asusta al ver tantos walkers y lo bota de su lomo. Rick luego cae encima de una varilla, ensartándosela, mientras los caminantes se acercan a su cuerpo…

¿Será éste ya el fin de Rick? ¿Así de simple será la despedida del protagonista de tantas batallas? ¿Nos van a entregar un capítulo de flashbacks para que ahí quede su legado?

De ser así, realmente sería un total desperdicio para una serie que iba recobrando cierta calidad, pero que con un golpe así, al menos en este momento, fomentaría todavía más el abandono masivo de los fanáticos.

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