Time’s Up fue fundada por mujeres de Hollywood para abordar el comportamiento inapropiado de jefes como Harvey Weinstein
Time’s Up se fundó en 2018 con el objetivo de frenar las conductas sexuales inapropiadas y la cultura del silencio dentro de Hollywood. En un principio, más de 300 mujeres firmaron la carta para ayudar a poner fin a estos abusos en los lugares de trabajo dominados por hombres. La fundación pudo recaudar $16.7 millones en GoFundMe y consiguió la ayuda de artistas como Meryl Streep, Ava DuVernay y Reese Witherspoon.
No obstante, el movimiento comenzó a recibir críticas desde 2020, cuando la organización de Time’s Up se negó a brindar apoyo financiero a una mujer que acusó al entonces candidato presidencial Joe Biden de agresión sexual. Luego, a principios de este año, la organización fue criticada por encubrir a un miembro de su equipo acusado de encubrir acoso sexual y de obligar a otros a firmar acuerdos legales de no-denigración, parecidos a los acuerdos que la organización rechazaba como parte de su filosofía.
La Gota que derramó el vaso
Roberta Kaplan, presidenta de Time’s Up, fue duramente criticada luego de ayudar a la compañía Goldman Sachs en un caso sin revelar de acoso sexual. sin embargo, la semana pasada se vio obligada a renunciar luego de que se supiera que asesoró personalmente a la administración del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, sobre cómo actuar frente a sus acusaciones de abuso sexual y evitar problemas legales. Supuestamente, en una carta firmada por Kaplan, Cuomo menospreciaba a una de las víctimas demandantes, causando gran furor en redes sociales.
“Desafortunadamente, los acontecimientos recientes han dejado en claro que incluso nuestros aparentes aliados en la lucha por el avance de las mujeres pueden convertirse en abusadores”, escribió Kaplan en su carta de renuncia. “Se han planteado preguntas importantes sobre cómo y por qué Time’s Up hace lo que hace, así como demandas por parte de los defensores y el personal de una especie de transparencia radical”.
al parecer, hay reportes que aseguran que el equipo de Cuomo, quien tuvo que renunciar de su puesto también la semana pasada, le pedía a la organización que fomentara y publicara las acciones del exgobernador, incluso fomentando supuestas iniciativas de género hechas por él. Sin embargo, cuando sus denuncias se hicieron más públicas de diciembre de 2020, los miembros ejecutivos de Time’s Up pidieron al equipo mantenerse callados.
Un Problema Mucho Más Profundo
Sin embargo, ex empleadas de Time’s Up le dijeron al periódico The Daily Beast que la situación de Cuomo es apoyada por poderosos ejecutivos que ordenaban políticas basadas en sus conexiones con los medios y los actores del poder político, en lugar de las necesidades de las víctimas. “Era el patriarcado con un vestido puesto” mencionó una exempleada.
Las exempleadas le dijeron al medio que el personal recibía correos electrónicos de la asistente de Cuomo, Melissa DeRosa, pidiéndoles que promovieran el trabajo del gobernador. Los empleados también dijeron que fueron reprendidos por publicar en las redes sociales sobre Alessandra Biaggi, una senadora del estado de Nueva York, sobreviviente de agresión sexual y crítica de Cuomo.
También mencionaron que un día recibieron una llamada telefónica de la dirección de Time’s Up para decirles que dejaran todo en lo que estaban trabajando debido a que la periodista Gayle King estaba siendo acosada en línea, y uno de sus poderosos amigos en Hollywood le había pedido a la organización que la apoyara. “Se sentía tan lejana a la realidad, incómodo y no relevante, pero debido a que habíamos recibido esa llamada, era la máxima prioridad del día”, dijo un ex miembro del personal. “Literalmente podría detenerse un día si alguien llamaba y decía: ‘¿Cómo no hemos dicho o hecho algo al respecto?’”
Además, aseguraron que Christina M. Tchen, directora ejecutiva de Time’s Up, planteaba un problema debido a sus conflictos de intereses debido a sus fuertes conexiones con grandes ejecutivos y poderosos magnates de la industria. Cuando se incorporó como directora ejecutiva en 2019, proporcionó a la organización una lista de empresas para las que había consultado anteriormente y los empleados dicen que no podían hablar de esas organizaciones. Por ejemplo, en 2019, Uber publicó un informe sobre agresiones sexuales en sus autos y empleados de Time’s Up, dijeron que se les pidió que enviaran un tweet alabando a Uber por su transparencia.
También criticaron a la directora por “no tener una estrategia firme ni duradera” sino que simplemente “Seguían el tema de moda en el momento”.
A principios de esta semana, y por la revelaciones de Cuomo, más de 100 sobrevivientes, ex empleados de Time’s Up y ex clientes del fondo de defensa legal de Time’s Up, publicaron una carta abierta para pedir que llevara a cabo una investigación por parte de un tercero. “Esta organización no existe desde hace cuatro años. No creo que valga la pena dar la vuelta ”, dijo un ex miembro del personal. “Si la gente se preocupa por este tema, hay muchos grupos comunitarios de base que están apoyando a los sobrevivientes y ayudándolos” agregó.
